El gobierno español acusa el presidente Quim Torra de bloquear la mesa de diálogo para enquistar los problemas con el Estado. Desde Madrid se insiste que la segunda reunión se puede hacer de manera inminente pero que es la Generalitat quién pone trabas.
Además, la Moncloa vincula directamente esta mesa a la negociación de los presupuestos con Esquerra. De hecho, la ministra portavoz pide a los republicanos que hagan de interlocutores con Torra para desencallar la mesa. Con Torra o con Carles Puigdemont o Artur Mas dice con ironía la portavoz María Jesús Montero.
La misma ministra también advierte Torra que las sentencias judiciales se tienen que cumplir y que la justicia actuará sin contemplaciones si desobedece la probable inhabilitación que dictará el Supremo antes de acabar el mes de septiembre.
La portavoz del Gobierno, Meritxell Budó, ha explicado que es Pedro Sánchez quién tiene que hacer el siguiente paso y aceptar que a la mesa de diálogo se hable de autodeterminación y amnistía.