Antoni Vives, exteniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona durante el mandato de Xavier Trias, está ultimando un pacto con la Fiscalía para evitar ingresar en la cárcel por el caso Leslie, a cambio de aceptar una condena de dos años y el pago de una multa de 60.000 euros, avanza El Periódico de Catalunya. A Vives, eso sí, se lo investiga también en el caso del 3%, sobre la presunta corrupción y financiación ilegal de Convergència, y una eventual segunda condena lo llevaría a prisión.
Como presidente de la empresa pública metropolitana Barcelona Regional, Vives contrató como técnicos a Antoni Miquel Cerveró (el vocalista del grupo Los Sírex conocido por el apodo Leslie) y el exalcalde de Santa Coloma de Cervelló Jesús Arévalo, cuando CiU accedió al gobierno municipal tras la victoria electoral de Trias.
Después de querellarse inicialmente contra Vives por las presuntas contrataciones simuladas y por gastos que una auditoría interna consideró "antieconómicos", la Fiscalía siguió adelante sólo con el asunto de las contrataciones, ya que no apreció indicios de delito en cuanto a los gastos, y pidió cinco años de prisión para Vives, que acusó al Ayuntamiento de Barcelona, personado como acusación particular, de formular contra él acusaciones sin fundamento.
El juicio contra Vives se tenía que celebrar esta semana pero se aplazó hasta el mes de octubre porque el exregidor se encuentra en el extranjero por motivos laborales. A diferencia de la Fiscalía, que limita la acusación sobre contrataciones ficticias a Jesús Arévalo, el Ayuntamiento de Barcelona acusa a Vives también por la contratación de Antoni Miquel Cerveró.
