El plan de desconfinamiento del gobierno español ha sido duramente criticado por la consejera Alba Vergés. En una rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial de Salud, con el ministerio y las comunidades autónomas, ha dicho que la manera como está gestionando el ministerio el confinamiento ni ha funcionado ni funcionará.
"Las decisiones serán territorialitzades o no serán. Este estado de alarma no funciona ni funcionará. Esta improvisación hace daño a la ciudadanía", ha criticado la consejera.
Vergés ha cargado contra el gobierno español porque, asegura, sólo les piden información para tomar las decisiones. Se queja que no tienen en cuenta sus aportaciones. Visiblemente molesta, la consejera ha asegurado que la Generalitat no es una gestora.
La consejera también critica que Madrid no les ofrece la posibilidad de participar en el diseño del desconfinamiento. Según Vergés las actuaciones tienen que ser descentralizadas o no pueden ser. Incluso en Cataluña cómo se pudo ver en el caso de la Conca d'Òdena.
Las comunidades autónomas han elaborado planes propios que han propuesto en una videoconferencia al ministro de Sanidad. Salvador Illa avisa: las propuestas se estudiarán, pero quienes llevarán el timón será el gobierno español. El camino hacia el desconfinamiento será gradual y asimétrico, pero no se hará necesariamente por comunidades autónomas, sino por territorios.
Se tendrá en cuenta el ritmo de contagios -que tendrá que ser inferior a una persona por paciente- y el nivel de presión de su sistema sanitario. La mitad de las camas en las unidades de cuidados intensivos tendrán que estar libres para atender otras enfermedades que no sean la Covid-19 y la tasa de hospitalización por coronavirus no tendrá que superar el 30 por ciento.