La campaña electoral se ha acortado. La ley española se reformó y permite que en una repetición de comicios pase de ser de quince días a ser sólo de ocho. En otras ocasiones, la obsesión enfermiza de Cs y PPC de criticar a los independentistas para tener "el Parlament cerrado" había llevado a la Mesa de la cámara a mantener la actividad en medio de las campañas electorales, incluso la celebración de plenos.
Ahora, pero, a pesar de haber una campaña de la mitad de duración, el Parlamento catalán ha decidido que se aplaza el pleno que estaba previsto para la semana de campaña del 10-N y que no habrá más sesiones de control parlamentario ni votaciones hasta después de las elecciones españolas.
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