Alfred Bosch, entonces líder de Esquerra en Barcelona, envió en 2017 una carta a la alcaldesa Ada Colau ofreciéndose a entrar en el gobierno municipal de manera transitoria para organizar el referéndum del 1 de octubre.
La carta, a la que ha tenido acceso RAC1, fecha del 7 de julio, tres meses antes del referéndum. Bosch alargaba la mano a Ada Colau para implicarse en la firma de decretos, para buscar fórmulas para abrir los colegios, o si hacía falta, para ser él quien asumiera la responsabilidad legal. Este compromiso preveía incluso entrar al gobierno municipal temporalmente, siempre con el objetivo de garantizar el referéndum.
La alcaldesa le respondió a los cuatro días que veía con buenos ojos la propuesta. Eso sí, si estaban dispuestos a gobernar, tenía que ser de manera permanente para afrontar también el resto de retos de la ciudad.
En el texto, Colau también insistía que estaba comprometida a facilitar la participación de los ciudadanos el 1 de octubre, velando siempre por la seguridad de la institución y los trabajadores. Y decía que quedaba a la espera que la Generalitat convocara el referéndum y concretara las demandas en los ayuntamientos. Finalmente la alcaldesa no aceptó el ofrecimiento de Esquerra.