El exministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, ha justificado la actuación de Policía Nacional y Guardia Civil durante el 1 de octubre por la ausencia de unidades de los Mossos d'Esquadra. Lo ha manifestado en el juicio del 'procés', en el Tribunal Supremo.
"Yo no di la orden de qué tenían que hacer ni como lo tenían que hacer", ha dicho sobre las acciones de la Policía Nacional española y la Guardia Civil. El testigo ha certificado que el máximo responsable del dispositivo del 1-O era Diego Pérez de los Cobos, investido como coordinador de los cuerpos policiales en fechas previas al referéndum para atender el mandato judicial.
Zoido ha expuesto que él, como ministro, no "diseñó" el despliegue del 1 de octubre, una función que ha atribuido a los responsables "operativos": ha citado al mismo Pérez de los Cobos, al jefe superior de la Policía Nacional, al general de la Guardia Civil y a los titulares de los Mossos d'Esquadra.
El exministro de Interior ha dicho que los mismos responsables que planificaron el despliegue tomaron la decisión de parar las intervenciones, sin aportar más detalles.
Zoido, que ha esquivado la palabra violencia, ha definido la actuación de la Policía Nacional y la Guardia Civil la jornada de la votación como "proporcionada", si bien los agentes se encontraron -según su relato- una "resistencia activa y coordinada" de la multitud congregada en los colegios electorales. Para Zoido, estos ciudadanos ejercieron de "escudos humanos".
El exministro ha admitido que, a pesar de ser el máximo responsable de Interior, no solicitó información sobre los planes de actuación.
Zoido ha apuntado que, después de la aplicación del artículo 155 -en que se relevó el mayor Josep Lluís Trapero-, sólo habló en una ocasión con su sustituto, Ferran López. "Le dije que esperaba que cumpliera con la legalidad vigente, la Constitución y el Estatuto", ha expresado. De Trapero ha dicho que planteó "reticencias" a la coordinación de los cuerpos policiales antes del referéndum. "No era muy colaborador", ha añadido.