Este lunes ha empezado en la Audiencia Nacional el juicio contra el expresidente del Barça Sandro Rosell. Los abogados de la defensa cuestionan que este tribunal sea competente para juzgar el expresidente azulgrana.
El abogado de Rosell, Pau Molins, asegura que no tiene sentido que lo juzgue la Audiencia Nacional porque de los tres delitos que lo acusan, dos habrían pasado fuera de España y el tercero en la circunscripción de Barcelona. En este caso lo tendrían que juzgar en la Audiencia de Barcelona.
Además de Rosell, también está acusado su socio y cuatro personas más. La Fiscalía les acusa de blanquear capitales a través de un entramado de empresas organizado, y les pide más de 10 años de prisión. En el centro de las operaciones de Rosell, hay sus negocios con la Confederación Brasileña de Fútbol.
El expresidente del Barça está encarcelado desde mayo del 2017. Cumple la prisión preventiva más larga de España por un delito económico privado.
Molins, que reclama la libertad provisional de su cliente, como mínimo hasta cuando acabe el juicio, afirma que quieren juzgar el ex máximo responsable del Fútbol Club Barcelona por unas cuestiones que hace 12 años no eran delito.
El abogado ha espetado a la sala que hay un riesgo alto que no sean imparciales por considerar que pueden haber sido contaminados por la fiscalía. Molins también ha dicho que hay el peligro de condenar Rosell a pesar de sospechar que no es culpable, puesto que ha añadido que sería muy difícil de digerir que lo hayan tenido dos años en la prisión para acabar soltándolo sin cargos.
