El expresidente de la Generalitat Artur Mas estará inhabilitado hasta el 23 febrero de 2020, según el cumplimiento de la condena por desobediencia por la organización del 9N que ha establecido el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). A partir de entonces, Mas podrá volver a ejercer cargos públicos.
El auto de ejecución de la condena, además, requiere a Mas el pago de la multa de 36.000 euros prevista en la sentencia y establece que las penas de inhabilitación impuestas a la exvicepresidenta Joana Ortega y a la exconsejera Irene Rigau, como en el caso de Mas, empezaron a contar a partir de este 23 de gener, cuando el Tribunal Supremo dictó la sentencia firme. A diferencia de Mas, condenado a trece meses, Ortega ha sido inhabilitada por un periodo de nueve meses y Rigau, por seis meses.