Varios sindicatos de los Mossos d'Esquadra han pedido este viernes la dimisión del consejero de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, después de los disturbios ocurridos en las protestas de este jueves en Terrassa y Girona, donde había convocadas manifestaciones de antifascistas y de Vox, por el aniversario de la Constitución.
En un comunicado, Sap-Fepol -el sindicato mayoritario de la policía catalana- ha expresado que están hartos del cuestionamiento de "cada una" de las actuaciones de los agentes, han pedido la despolitització del cuerpo, ha calificado de inadmisibles las presiones para reformar la cúpula de Interior y ha solicitado la dimisión del consejero.
El portavoz de Fepol, Toni Castejón, ha criticado que si bien el director general de los Mossos, Andreu Martínez, defendió la actuación de los agentes, Buch y el presidente de la Generalitat, Quim Torra, los han señalado y han dicho que se investigarán las imágenes de las cargas.
El SPC también ha pedido en un comunicado la dimisión de Buch, y ha alegado que "más que un consejero de Interior parece que sea el consejero de los CDR". Según este sindicato, a Buch le importa más el que piense este colectivo que lo que piensen los Mossos y la integridad física de los agentes.
El portavoz del sindicato Uspac, Josep Miquel Milagros, ha condenado la "violencia de lo que tendrían que ser concentraciones pacíficas", porque considera que los disturbios deterioran la imagen del conjunto de la ciudadanía de Cataluña. Ha pedido que la Generalitat se persone como acusación particular contra los manifestantes que agredieron los agentes y dejen los Mossos fuera del debate político.