El PP ha pedido al Tribunal Constitucional que prohíba el voto delegado de Carles Puigdemont y Antoni Comín en una medida cautelar urgente, tal como consta en un escrito al cual ha tenido acceso la Agencia EFE.
De este modo, los populares quieren impedir que los votos del expresidente de la Generalitat y del exconsejero catalán de Sanidad puedan servir para investir a Quim Torra en el pleno el Parlament que empieza este sábado.
El PP argumenta que el TC ya decidió admitir a trámite su recurso contra el voto delegado de los dos diputados de JxCat huidos de la justicia española, a pesar de que el Constitucional no tomó medidas cautelares.
Al PP considera que hay que suspender los acuerdos de la Mesa de la cámara catalana en referencia al voto delegado porque si no podría aprobarse una investidura «nula de pleno derecho» por haberse hecho con «votos ilícitos».
Al otro lado del arco político, la organización juvenil Arran, que se ubica dentro de la órbita de la CUP, también se muestra absolutamente contraria al hecho de que Quim Torra acabe siendo investido nuevo presidente de la Generalitat.
En su cuenta de Twitter, Arran dice que: «la investidura de Quim Torra no sirve para mantener el embate (obediencia al Estado), ni para sumar, ni para romper identitarismos, ni muestra la correlación de fuerzas dentro del independentismo. Es una mala opción a nivel táctico y estratégico».
Se da la circunstancia que la CUP se ha visto obligada a convocar un consejo político de urgencia después de que tres asambleas territoriales han pedido la celebración de este órgano del partido por estar en contra de que la formación se abstenga en la votación a Torra, considerando que hay que votar en contra.
