Nasser Al-Khelaifi, presidente del PSG y socio del catalán Jaume Roures en Bein Sports, ha declarado este miércoles en Berna en el marco de una investigación sobre la corrupción en la FIFA. Este empresario catarí está en el punto de mira de la justicia suiza como sospechoso de haber sobornado al ex-secretario general de la FIFA Jerome Valcke para conseguir los derechos de retransmisión de los Mundiales de fútbol que se disputarán en 2026 y 2030.
Después del interrogatorio, Al-Khelaifi ha declarado que «no tengo nada a esconder» y ha explicado que «he llegado tranquilo y me voy tranquilo». También se ha puesto a disposición del fiscal en caso de que quiera volver a citarlo.
A Valcke se lo acusa de haber aceptado sobornos para facilitar derechos de retransmisión de cuatro Mundiales. Al-Khelaifi, por su parte, ha comparecido ante la fiscalía suiza como máximo responsable de Bein Sports. El canal de este gigante mediático en España está participado en un 50% por el grupo catarí y en un 50% por Mediapro, grupo del que es hombre fuerte Jaume Roures.