El presidente del gobierno de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha visitado después de votar en Cornellà de Terri, el colegio electoral que le correspondía votar, en Sant Julià de Ramis, pero que ha sido tomado literalmente por la Guardia Civil con la intención de evitar el voto de la primera autoridad catalana.
Puigdemont ha visitado el colegio y ha hablado con algunos los ciudadanos allá reunidos. Después, ante los medios de comunicación, ha lamentado la brutalidad policial. Según el presidente, «la imagen del Estado español ha llegado a unas cuotas de vergüenza que quedarán de por vida». En la misma línea, el presidente añadía: «Hoy el gobierno español ha perdido mucho más de lo que había perdido hasta ahora; hoy, Cataluña ha ganado mucho más del que ya había ganado».
Los presentes en el pabellón de Sant Julià de Ramis (Girona) han esperado la salida del presidente Puigdemont y lo han despedido con gritos de «votaremos» y «presidente» para mostrarle su apoyo.
