El Parlamento ha aprobado la ley fundacional de la República y de Transitoriedad. Esta norma representa el marco legal por el cual se tiene que regir Cataluña, de ganar el sí en el referéndum previsto el próximo 1 de octubre.
Después de una nueva sesión maratoniana del Pleno del Parlamento de Cataluña, llena de trabas y enfrentamientos verbales entre la mayoría independentista y la oposición, el texto ha sido aprobado por los 71 votos de Junts pel Sí, la CUP, más el del diputado no adscrito, Germà Gordó. La propuesta ha tenido los 10 votos en contra de Catalunya Sí que Es Pot, y tanto Ciudadanos, como el PSC y el PP han vuelto a abandonar el hemiciclo y no han participado en la votación.
La aprobación se ha hecho, como ya se hizo este miércoles con la ley del referéndum, por la vía expreso del artículo 83.1 del Reglamento (sin debate a la totalidad, sin dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias y con sólo dos horas para presentar enmiendas) cosa que ha provocado enfrentamientos entre la mayoría independentista y la oposición que han provocado que la sesión plenaria de este jueves se haya alargado hasta las dos de la mañana de viernes.
El PP ha acabado retirando su enmienda y han sido rechazadas las de Ciudadanos. Sí que se han aceptado las enmiendas de los grupos proponientes que han hecho cambios en la sindicatura electoral, refuerzan la soberanía del Arán y el pueblo aranés y da un reconocimiento expreso a la lengua de signos catalana.
La ley de Transitoriedad ha sido aprobada por el Pleno de la cámara catalana pocas horas después de que el Tribunal Constitucional (TC) haya suspendido la ley del Referéndum, aprobada este miércoles, a partir de la demanda presentada por Gobierno central.
