Expediente a la ‘zona de guerra’ de El Vendrell

La antigua fábrica Superave ya ha sufrido dos incendios y está en ruínas
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Los escombros de la antigua fábrica Superave SA, en concurso de acreedores desde hace cinco años, se han convertido en un peligro público para los niños y jóvenes de El Vendrell que frecuentan este lugar. El administrador concursal de esta empresa, el leridano Josep Maria Rusiñol, mantiene en un estado deplorable este antiguo matadero, ubicado a tocar de las casas de la urbanización La Muntanyeta, que ya ha sufrido dos incendios y está totalmente vandalizado.

Sin ninguna valla que impida el acceso a las naves y dependencias de la fábrica, este lugar es un antro de suciedad, lleno de trampas y estructuras muy deterioradas que pueden caer en cualquier momento sobre los visitantes que acceden fácilmente a él. Vecinos de La Muntanyeta que se han dirigido a este diario para denunciar esta alarmante degradación nos informan que hay casos de niños que se han hecho daño en esta ‘zona de guerra’, el último hace pocos días.

Desde el Ayuntamiento de El Vendrell, el departamento de comunicación explica que el consistorio ha abierto un expediente contra el responsable de este abandono, el administrador concursal Josep Maria Rusiñol , y que se han emitido dos órdenes de ejecución para que instale medidas de seguridad para impedir el acceso a la fábrica abandonada. También se le ha notificado que retire las placas de fibrocemento. De momento, no ha hecho nada.

Contactado por EL TRIANGLE, Josep Maria Rusiñol se ha mostrado dispuesto a negociar una posible compensación con todos aquellos que hayan sufrido algún accidente en estas ruínas a cielo abierto. Además de administrador concursal, Josep Maria Rusiñol es el vicepresidente de la Cámara de Comercio de Lleida, donde actúa en estrecha colaboración con Joan Simó, el «gran factótum» de la ex-Convergència Democràtica en la zona.

Según los vecinos, resulta inexplicable que, cinco años después de presentar concurso de acreedores, esta gran fábrica abandonada continúe degradándose, sin que el administrador concursal no lo haya securizado o vendido. Se trata de un «bombón» urbanístico con un alto potencial especulativo, puesto que el Ayuntamiento de El Vendrell está tramitando la recalificación de estos terrenos en zona terciaria, que, según fuentes municipales, permitiría la ubicación de un centro comercial.

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