Los audios revelados este lunes por Público en su última información sobre la comida de La Camarga dejan en evidencia a la presidenta del PP catalán, Alícia Sánchez-Camacho.
La dirigente popular ha negado insistentemente toda implicación por su parte en la grabación de aquella reunión con Vicki Álvarez, la ex-pareja de Jordi Pujol Ferrusola, incluso cuando ha comparecido para declarar en los tribunales.
Pero los primeros minutos de audio grabados en ell reservado de La Camarga -entre la llegada de un empleado de la agencia de detectives Método 3 llevando las flores donde se escondía el micrófono y el inicio de la conversación- ponen de manifiesto que Sánchez-Camacho incurrió en falso testimonio.
De entrada, queda claro que Método 3 recibió el encargo de Sánchez-Camacho cuando el empleado de la agencia dice que hicieron la reserva para la presidenta de los populares catalanes, y también se pone de manifiesto que Método 3 asume la cuenta y que la paga por adelantado.
Estas evidencias contrastan con que Sánchez-Camacho, comprometida a decir la verdad en sede judicial, declaró: «Le digo lo que recuerdo. Yo, como no pago jamás en efectivo ni con tarjeta de nada, supongo que me pondrían el ticket, yo firmaría y se enviaría al partido para ser cobrado…».
A raíz de la difusión de aquella grabación, la líder del PP catalán interpuso una denuncia contra Método 3 -en cuyo marco prestó aquella declaración- y también una demanda contra EL TRIANGLE por la publicación del audio y por el contenido de dos portadas. El Tribunal Supremo ha desestimado recientemente el recurso de casación de este semanario, condenado a pagar 20.000 euros de indemnización a Sánchez-Camacho.