El Arzobispado de Barcelona ha decidido abrir una investigación para clarificar qué pasó a principios de mes, cuando en la parroquia de la Inmaculada Concepción de l’Hospitalet de Llobregat se celebró una misa dedicada a la División Azul.
Los actos celebrados en esta iglesia fueron desde una misa, a la imposición de condecoraciones, saludos militares, se cantó el Cara al Sol, y todo acompañado por abundantes imágenes de carácter falangista y fascista, según ha denunciado La Directa.
El rector que estuvo al frente de los actos litúrgicos es Custodio Ballester Bielsa, cura que se ha hecho famoso por sus declaraciones en contra del aborto y por su apoyo a los legionarios. Este cura permitió, el pasado mes de marzo, el desfile de veteranos de la Legión española en la procesión de Semana Santa por l’Hospitalet, a pesar de la prohibición explícita del ayuntamiento de la ciudad.
El Arzobispado ha hecho público un comunicado en el cual dice que «tomamos nota de la misa que se celebró el día 5 de noviembre en la parroquia de la Inmaculada Concepción y así se le transmitirá a su rector».
La nota del arzobispo añade que «la misión de la Iglesia en ningún caso tiene que ser la de hacer política, sino la de acompañar a todos los fieles en su encuentro con Dios», y que después de valorar los hechos «se tomarán las acciones pertinentes».
Los actos celebrados en l’Hospitalet estuvieron organizados por la Hermandad de Combatientes de la División Azul de Barcelona, para conmemorar el 75 aniversario de la creación de esta unidad que Franco organizó para ayudar a la Alemania de Hitler .
Después de la misa en memoria de los combatientes de la División Azul, el centenar de asistentes se desplazaron a una sala de actos donde había una mesa decorada con una bandera preconstitucional, y varios maniquís con ropa militar y símbolos de ideología nazi.
Un miembro superviviente de la División Azul y familiares de dos combatientes más recibieron medallas por su participación en la II Guerra Mundial junto al ejército alemán. Los actos celebrados en la parroquia de l’Hospitalet de Llobregat se extendieron durante todo el día.
