Las familias del barrio barcelonés de Ciutat Meridiana amenazadas de desahucio han dejado de llevar sus hijos a la escuela.
Algunas entidades bancarias aprovechan el momento en que los padres acompañan los niños a la escuela para cambiar las cerraduras y apoderarse de sus viviendas.
Cuando se practica un desahucio en una vivienda donde hay niños, la Ley obliga a avisar a los servicios sociales, que deben personarse en el lugar y velar porque los niños no queden desprotegidos.
Para ahorrarse este trámite, algunas entidades optan por desalojos «expres» o «a traición», tal como los denominan en Ciutat Meridiana. En este barrio, en las últimas semanas se ha echado cinco familias de casa aprovechando que en ese momento no había nadie porque los padres o uno de los progenitores había acompañado los hijos a la escuela.
En estos casos, no se informó el Juzgado correspondiente ni a los servicios sociales.
El Ayuntamiento de Barcelona ha actuado para que las familias amenazadas puedan escolarizar sus hijos sin el temor que, cuando vuelvan a casa, ya no puedan entrar. Desde hace tiempo, a Ciutat Meridiana también se la conoce por ‘Villadesahucio’.
