Los Mossos d’Esquadra han procedido a desalojar el Banco Expropiado de Gracia, una antigua sucursal de Caixa Tarragona ubicada en la Travessera de Gràcia de Barcelona, número 181, que fue ocupada en 2011.
Un amplio dispositivo formado por decenas de agentes se ha desplegado a partir de primera hora de la mañana en los alrededores del espacio, que ahora pertenece a una inmobiliaria, sobre el que había una orden de desalojo desde hace meses. El vaciado de este inmueble no fue reclamado, mediante una demanda civil, por Catalunya Caixa hasta 2013.
El año pasado, hacia el final del mandato de Xavier Trias, el Ayuntamiento de la capital catalana asumió el precio del alquiler del local de todo el año -66.500 euros-, de forma que los okupas se mantuvieron el resto de 2015 sin riesgo de desalojo.
Eso sí, observaron que Trias y su equipo de gobierno, que argumentaron razones de interés social para justificar esta decisión, había intentado «comprar la paz social» en año de elecciones, meses después del desalojo fallido -y muy controvertido- del emblemático Can Vies. Los convergentes, por su parte, esgrimieron la conciliación del derecho del propietario y el mantenimiento de la actividad en el local.
El nuevo gobierno de la ciudad, liderado por Ada Colau, quiso cancelar el acuerdo, pero el coste era mayor que continuar pagando hasta que el contrato expirara. Así pues, no ha sido hasta enero de 2016 cuando el Ayuntamiento ha dejado de pagar el alquiler. El procedimiento de desalojo se reactivó a partir de entonces.
Para la alcaldesa Colau este desalojo es un asunto «entre privados», pero los partidarios de esta ocupación también culpan al actual gobierno municipal. Se han convocado manifestaciones este lunes que confluirán en Gracia en defensa del Banco Expropiado, una causa divulgada en Twitter con la etiqueta #ElBancResisteix. El desalojo todavía no había terminada a mediodía.
