El Tribunal Constitucional (TC) ha anulado la ley catalana que prohíbe el uso de la técnica del ‘fracking’ o fractura hidráulica en todo el territorio porque considera que invade competencias estatales en materia de minería. El Tribunal ha suspendido algunas leyes parecidas con los mismos argumentos en comunidades autónomas como Cantabria o Navarra, que también han legislado prohibiendo esta técnica de extracción de hidrocarburos.
La ley anulada por el alto tribunal prohibía utilizar esta técnica siempre que pudiera tener efectos negativos sobre las características geológicas, ambientales, paisajísticas o socioeconómicas de la zona, o en relación con otros ámbitos competenciales de la Generalitat. Aún así, lo que tumba la suspensión del TC es la prohibición genérica del «fracking», de forma que la Generalitat seguirá con la capacidad de autorizar, o no, tanto los permisos de investigación como las declaraciones de impacto ambiental. En este sentido, el secretario de Empresa y Competitividad de la Generalitat, Joan Aregio, ya ha manifestado que el gobierno no dará autorizaciones para implementar esta tecnología, que provoca graves destrozos en el medio ambiente.