Toni Martí, el jefe de Gobierno del Principado de Andorra, y el partido que encabeza, Demòcrates per Andorra, han hecho piña con el ministro de Finanzas, Jordi Cinca, ante la petición formal de dimisión expresada por el Partit Socialdemòcrata.
Cinca aparece en los papeles de Panamá, por lo que los socialdemócratas consideran que está perjudicando a la imagen del país de los Pirineos en un momento crucial, cuando se negocia con la Unión Europea. Pero Demòcrates per Andorra ha expresado por voz de su secretario de organización, Esteve Vidal, que pedir la dimisión de Cinca por este asunto es «irresponsable», argumentando que una decisión en ese sentido «perjudicaría al país». «No habría nada peor que la dimisión de Cinca», ha precisado Vidal, añadiendo que la actividad panameña del ministro no es «delictiva ni poco ética», por lo que aduce que «no merece ningún tipo de castigo».
Martí ha expresado su «apoyo incondicional» a su ministro, subrayando que Cinca no dimitirá por los papeles de Panamá. el jefe de Gobierno ha relacionado las voces que piden la dimisión con el caso de la Banca Privada de Andorra (BPA), declarando que «no quiero ni pensar que todo esto se hace para que el proceso de BPA descarrile». Asimismo, ha cargado contra «aquellos que querrían que no se acabara culminando» la resolución de la BPA, entidad expropiada a los hermanos Higini y Ramon Cierco a raíz de las acusaciones de participación en el blanqueo de capitales procedentes de actividades criminales.
Los negocios de Cinca
El ministro Cinca ha admitido, sin aportar muchos detalles, el haber figurado como representante de una sociedad con presencia en Panamá. En concreto, estuvo vinculado en 1999 y 2000 con la instrumental Mariette Holdings, creada por el bufete Mossack Fonseca y disuelta en 2003. Cinca ha asegurado que esta sociedad no tiene relación con su patrimonio personal ni motivación fiscal alguna, y que se creó para trabajar más fácilmente en América Latina.
