La elección Jordi Jané como consejero de Interior, en sustitución de Ramon Espadaler, por parte del presidente Artur Mas, tenía un efecto secundario que Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) no ha sido capaz de evitar.
El escaño que ocupaba Jané en el Congreso de los Diputados se lo queda Teresa Gomis, exteniente de alcalde de Reus, que es ‘la siguiente de la lista’ y que está imputada en dos piezas separadas del caso Innova, de presunta corrupción en la ámbito sanitario.
Todos los esfuerzos convergentes para lograr que Gomis, número tres de CiU por Tarragona en las elecciones de 2011, abandonara la idea de ser parlamentaria en Madrid fueron en vano. Ni las reuniones con el secretario de organización de CDC, Josep Rull, ni la presión pública ejercida por el portavoz convergente en el Congreso, Pere Macias, quien pedía a Gomis que «reflexionara», han funcionado.
Gomis ya ha formalizado el acta y este martes toma posesión del escaño y se convierte en diputada a todos los efectos. El grupo parlamentario convergente se plantea si la rechaza o la acepta. Si la rechaza, pasará al Grupo Mixto de la cámara y CDC, en vez de diez diputados, tendrá nueve.
