La principal novedad del plan de acción para combatir la evasión fiscal que ha presentado esta semana la Comisión Europea es una lista negra, a partir de la información de los Estados miembros, de 30 países o territorios que no cooperan en la lucha contra el fraude y la evasión fiscal. Andorra, Mónaco, Liechtenstein y la isla de Guernsey están incluidos. La UE propone represalias a estos territorios si no aceptan intercambiar información. Bruselas también quiere reactivar un proyecto bloqueado desde 2011 que consiste en crear una base común del impuesto sobre sociedades en la Unión Europea.
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