Rafael Blasco, exconsejero de Solidaridad y Ciudadanía del Gobierno valenciano, ha ingresado este lunes, poco antes de las 9 de la mañana, en la cárcel de Picassent, donde cumplirá una condena de seis años y medio de privación de libertad por haber desviado fondos públicos que se habían destinado a cooperación internacional.
Blasco, de 70 años, se convirtió en parlamentario en las Cortes Valencianas en 1983 y también ha dirigido las consejerías de Sanidad, Ordenación del Territorio, Bienestar Social, Trabajo, Obras Públicas y Urbanismo y Presidencia. Ha sido condenado por la primera pieza del llamado caso Cooperación por malversación en concurso de prevaricación y falsedad y aún tiene pendientes dos causas judiciales más relacionadas con otros desvíos de fondos que se tenían que dedicar a causas solidarias, una de ellas, la construcción de un hospital en Haití.
