El consejero de Presidencia, Francesc Homs, tiene una manguera mágica con la que riega de manera copiosa a los medios de comunicación de Catalunya. Son tiempo de recortes presupuestarios draconianos y de emergencias sociales que afectan a amplios sectores de la población, pero el Palau de la Generalitat se ha convertido en una especie de tómbola donde se regala el dinero de manera espléndida, siempre, está claro, que se haga la pelota al proceso soberanista.
Hace unos días, el Diario Oficial de la Generalitat (DOGC n. 6858) ha publicado la relación de subvenciones otorgadas por el departamento de Presidencia durante el segundo semestre del año pasado. Un total de 196 publicaciones escritas (revistas y diarios), 58 webs, 21 televisiones y 15 emisoras de radio han recibido una lluvia de millones. Con la excusa, absolutamente loable, de la protección y la promoción de la lengua catalana, el consejero Francesc Homs establece una discriminación descaradamente sectaria que premia a unos grupos de comunicación más que a otros, en función de sus afinidades políticas con el presidente Artur Mas y CiU.
Los tres más mimados
El grupo mediático gerundense que edita El Punt Avui y que preside el empresario Joaquim Vidal es el que acumula el importe más elevado de subvenciones, con 1,045 millones, repartidas en cinco conceptos: el diario, la web, L’Esportiu (2) y la televisión local de Girona. En segundo lugar figura el editor valenciano Eliseu Climent, que se embolsa 1,042 millones a través de cinco partidas: dos subvenciones por la Associació Cultural del País Valencià, una por la Fundació Ausiàs March y dos por la revista El Temps. El conde de Godó es el tercer editor más beneficiado desde el Palau de la Generalitat, pero por debajo de los dos anteriores, con tres subvenciones que totalizan 1,008 millones de euros: una por la edición en catalán de La Vanguardia y dos por las emisoras RAC 1 y RAC105.
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