En su comparecencia posterior a la reunión del Consejo Ejecutivo del Gobierno de la Generalitat de Catalunya, el consejero de la Presidencia, Francesc Homs, se ha mostrado sorprendido por la polémica generada a raíz del cobro en siete hospitales catalanes de 5 euros a los acompañantes de enfermos que quieran pasar la noche en una butaca reclinable.
Para Homs, el único obstáculo que vería para que a una empresa hiciera ese negocio en un centro asistencial sería una hipotética transgresión del marco normativo: «Yo desconozco con detalle cual es el marco normativo, pero lo que sí que conozco, ni que sea por propia experiencia», ha dicho, es «que a menudo tienes que poner unas monedas para ver la televisión y que, por lo que yo tengo entendido de este caso concreto, entre unas butacas de aquellas que al cabo de un rato ya no sabes como ponerte», «si al final ha habido un centro hospitalario, que yo quiero pensar -porque esta es la parte que no conozco de esta historia- que tiene marco normativo para hacerlo, tuvo la idea de decir ‘aquí pondremos unas butacas que son más prácticas, no tengo dinero para pagarlas’, hay una empresa que las provee y cobra estos 5 euros, a todo esto no veo qué escandalera algunos quieren presentar, si las cosas se hacen dentro del marco de la normativa«.
«Hablamos del importe del que hablamos, 5 euros, y además, lo importante es que este tipo de decisiones, que no son las que configuran una asistencia sanitaria hospitalaria básica, porque estamos hablando del acompañante del enfermo, pues, ?qué quiere que le diga? También hay centros hospitalarios concertados que si hay suficientes habitaciones disponibles dan la opción que al acompañante le puedan poner una cama al lado, y eso parece que hace tiempo que se practica.», ha argumentado en su respuesta a EL TRIANGLE.
Panegírico
El portavoz del Gobierno ha aprovechado para insertar unas palabras en defensa del estado de la sanidad pública catalana. «Yo creo que esto forma parte, al final, de la posibilidad de mejorar una atención en el entorno del enfermo», ha dicho. Y ha insistido en señalar que «tenemos que saber situar el límite de aquello que tiene que formar parte del presupuesto público indiscutiblemente y tenemos una asistencia sanitaria con unos niveles de calidad y de gratuidad ‘de arriba’ de todo del mundo». El otro día, según ha explicado, una persona de Alemania le hizo «un panegírico de la sanidad pública catalana», «por las prestaciones que ofrece y por la gratuidad«, ha especificado.
El «ingenio» privado
Hacia el final de su respuesta, el consejero Homs ha hecho todavía más explícito el posicionamiento gubernamental. «Si hablamos de una butaca, de un acompañante, que los hospitales que lo hayan llevado a cabo, siempre y cuando hayan respetado la normativa, esto no tiene ningún coste para él, hay una empresa que ha tenido el ingenio de pensar que podrá amortizar estas butacas a base de cobrar 5 euros a aquellas personas que estén dispuestos a pagarlos, pues, escuche, como aquello de poner dinero para ver la televisión o como aquello de que te pongan una cama al lado si hay plazas suficientes», ha explicado Homs en relación a los negocios que proliferan en el seno de los hospitales.
«Hay polémicas que, sinceramente, me cuestan de juzgar», ha concluido.
