Una treintena, y diez más que se añadirán pronto, de los 200 trabajadores de Barcelona Televisió (BTV) y de Barcelona FM (BFM) subcontratados por las productoras BCN Audiovisual (Lavínia) y Antena Local (Mediapro) han llevado su irregularidad contractual al juzgado. Consideran que la subcontratación responde a una «cesión ilegal de trabajadores» y reclaman a la empresa municipal que gestiona la radio y la televisión públicas, Informació i Comunicació de Barcelona (ICB), que los internalice.
Sólo una veintena de trabajadores, entre los cuales se incluye el equipo directivo, están contratados directamente por la sociedad municipal. El resto, 185 por Lavínia y una decena por Mediapro, tienen contratos temporales que se renuevan periódicamente. Los profesionales entienden que desarrollan su tarea únicamente para la empresa pública y reclaman formar parte de la plantilla de ICB.
El juez puede obligar a internalizar a los denunciantes, si considera que hay una «cesión ilegal». La subcontratación de trabajadores por parte de ‘productoras amigas’ de los partidos que gobiernan es una práctica extendida en los medios de comunicación públicos. Hay varias sentencias favorables a trabajadores subcontratados por los medios de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals, TV3 y Catalunya Ràdio, por el grupo RTVE y por la Diputación de Barcelona, que tuvieron que indemnizar a los profesionales y, en la mayoría de casos, integrarlos en las redacciones que les correspondían.
Son una cuarentena, pero si la demanda se amplía y, vistos los precedentes, la acaban ganando los trabajadores subcontratados, el Ayuntamiento tendrá que preparar una buena partida para pagar las diferencias salariales, las indemnizaciones y los costes derivados del proceso judicial.
