Ni sabe nada de los negocios de su amigo íntimo Jordi Pujol Ferrusola, ni siquiera de los de su hermano Jordi Puig, ni sabía que lo habían hecho seguir sus compañeros de Convergència, ni sabe -a pesar de haber sido secretario de organización y secretario general adjunto de CDC- de las finanzas del partido. Y por lo que se refiere al informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal que lo acusa de cobrar comisiones y de favoritismos, el consejero de Ocupación, Felip Puig, ha negado, este martes en la comisión parlamentaria que investiga el fraude y la corrupción, su veracidad.
En Tivissa, donde una empresa en la que participó Pujol Ferrusola necesitaba conseguir el permiso de la Generalitat para hacer un negocio que le reportó más de 4,2 millones de euros en pocos meses, el entonces consejero de Medio Ambiente ha asegurado que «se cumplieron escrupulosamente todos los trámites» y que a pesar de ser amigos íntimos, «nunca tuve conocimiento de la relación de Jordi Pujol Ferrusola con este negocio. Lo supe a posteriori». «Yo no pregunto mis amigos íntimos si tienen negocios o dinero en el extranjero», ha explicado posteriormente.
Del informe de la Udef que lo acusaba de tener sociedades compartidas, un terreno recalificado, propiedades inmobiliarias y cuentas en paraísos fiscales: «Alguien sí que se creyó este informe, porque apareció en el diario El Mundo diciendo que cobré 250.000 euros en comisiones por el caso Palau. Esta información y este informe son falsos. Presenté querella. No se ha derivado ninguna instrucción judicial ni ninguna investigación», ha replicado.
Del seguimiento que sufrió por parte de espías de la agencia Método3 contratados supuestamente por el también convergente Xavier Martorell: «No tuve conocimiento hasta que aparecieron informaciones que decían que me habían seguido. Nunca me he creído la tesis que fueron compañeros de mi partido los que me hicieron seguir».
Tampoco ha dicho saber nada del uso de sedes oficiales para hacer negocios privados. Ni de cómo se gestionaban las finanzas del partido.
«Nunca he sido citado judicialmente por ninguna de estas acusaciones. Nunca ha habido ninguna instrucción judicial por ninguno de estos temas», ha dicho. «No tengo ni segundas ni terceras residencias. No tengo cuentas corrientes en Andorra, sólo he ido cuatro veces para esquiar. No quiero calificar a la UDEF por un informe que no ha tenido nunca la categoría de informe, pero todo aquello que se dice es falso. No sé ver en estas acusaciones más que una intencionalidad de destrucción política. Si alguna prueba se pudiera contrastar habría alguna instrucción judicial que me habría citado», ha argumentado para defenderse.
«Jordi Pujol Ferrusola y yo somos amigos desde que teníamos seis años. Mis padres y los suyos nos llevaron a la misma escuela. Hay momentos en que te ves más o menos. En algunos momentos nos hemos ayudado desde un punto de vista personal, nunca económicamente», ha explicado la relación con Júnior.
«Siempre he identificado los límites entre mi responsabilidad pública y privada. Siempre he tenido clara mi vocación de servicio público», ha añadido, para insistir que «nunca he tenido ningún negocio con Pujol Ferrusola, ni con ninguno de mis hermanos. Nunca, desde que empecé mi carrera en la administración, he compartido ninguna sociedad con nadie».
Puig, que ha negado saber nada del supuestos cobros de comisiones por la adjudicación de obras públicas, no se ha olvidado de mandar un mensaje a sus mentores: «Si he sido consejero ha sido gracias a la confianza de los dos presidentes de la Generalitat«.
