Algunos alcaldes, acompañados por una amplia representación del consejo ejecutivo de sus partidos, aprovechan los últimos días antes de entrar en campaña para inaugurar obras y ‘vender’ una buena gestión de los recursos a la ciudadanía. No es el caso de la Alta Velocidad. Un informe de la Federación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) determina la gestión desastrosa que conlleva la España del AVE radial.
PP y PSOE han destinado hasta el día de hoy 40.000 millones de euros en construir líneas de alta velocidad. A esta cifra habrá que sumar la inversión programada para los próximos años, de 12.000 millones. Cada ciudadano español habrá pagado 1.100 euros para financiar la alta velocidad. Una familia con dos hijos: 4.500 euros. Y eso que la mayoría no utilizarán nunca el AVE.
El documento de Fedea informa, como ya es sabido, que la línea Madrid – Barcelona es la más rentable. Sin embargo, asegura que ni tan sólo ésta acabará recuperando la inversión: en 50 años no se recuperará ni la mitad. Madrid – Levante o Madrid – Andalucía no recuperará ni el 10%. Y el corredor Norte no cubrirá ni los costes operativos actuales. Recomiendan que se cierre la línea y se dé por perdida la inversión para que no tengamos que pagar el déficit año tras año.
Para recuperar parte de la inversión deberían encarecer los billetes: Madrid – Barcelona un 50% más. Madrid – Andalucía un 120%. Levante (180%) y Norte (325%). Como esto no ocurrirá, se puede decir que el AVE ha beneficiado a las constructoras y a los usuarios, que no son precisamente una mayoría