El pitote que se ha generado en el Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (MACBA) a raíz de la cancelación de la exposición La bestia y el soberano, que contenía una escultura que representaba Al rey Juan Carlos I montado por una mujer de rasgos indígenas a quien un perro sodomizaba, ha desembocado, de momento, en la renuncia como director de Bartomeu Marí, responsable de la cancelación, y en un relevo de los comisarios de la muestra.
Marí, que negó que hubiera censurado o que hubiera recibido presiones para no tirar adelante con la muestra, ejercerá como director hasta que, mediante un concurso internacional, se designe su sucesor.
La comisión delegada del consorcio del MACBA, integrada por la Generalitat de Catalunya, el Ayuntamiento de Barcelona, el Ministerio de Cultura y la Fundación MACBA, además, ha decidido prescindir de los dos comisarios de aquella muestra que formaban parte de la plantilla del museo, Paul B. Preciado y Valentín Roma, que se habían opuesto al criterio de Marí y ejercían, respectivamente, como cabeza de programas públicos y conservador. Ambos apuntaban que el director conocía el contenido de la muestra, que ha acabado difundiéndose mucho más que si se hubiera llegado a exponer.
Marí ha presentado su dimisión en una reunión extraordinaria en la que han participado, entre otras, el consejero de Cultura, Ferran Mascarell. También estaba allí Leopoldo Rodés, el presidente del patronato de la Fundación MACBA, del cual forman parte destacados personajes de la vida pública catalana, como por ejemplo Macià Alavedra, ex consejero a los Gobiernos de Jordi Pujol procesado por el caso Pretoria, Isidre Fainé, presidente de CaixaBanc, y Joan Gaspart, empresario hotelero y expresidente de FC Barcelona. La presidenta de honor es la reina Sofía y el vicepresidente primero, Javier de Godó Muntañola, el conde de Godó.
