Los tres diputados del grupo mixto del Parlament, de la CUP, se han levantado de sus escaños en lo alto del hemiciclo después que David Fernàndez ha preguntado al consejero Espadaler por la actitud de la Cámara ante el bloqueo que sufrieron los diputados por activistas del 15-M en 2011. Fernàndez ha dicho sentir «vergüenza» por el recurso presentado por la Cámara y por el Gobierno contra la primera sentencia absolutòria de la Audiencia, que ha acabado, de momento, con la condena, por parte del Supremo, de ocho personas a tres años de prisión.
Fernàndez ha recordado que ningún diputado fue atendido por lesiones mientras que más de un centenar de jóvenes sí que recibieron asistencia. «¿Qué hacen el Parlamento y la Generalitat con la extrema derecha?», ha preguntado al consejero, y ha añadido que toda la operación estaba diseñada para criminalizar al movimiento de protesta ciudadana. El diputado ha lamentado que ni el Parlamento ni la Generalitat se hayan personado en el desfalco de Cataluña Bank, donde algunos gestores-políticos dejaron un agujero de 12.000 millones de euros.
Con los tres diputados de pie ante sus asientos, Espadaler ha respondido que se siente «más cercano» a la sentencia condenatoria del Supremo que a la absolutòria de la Audiencia.
