«Yo a los 30 años era un tio bastante rico y no he ganado ni un duro con la Generalitat», se ha retratado Josep Pujol Ferrusola, como resumen de la comparecencia del único de los hijos del expresidente que, de momento, no ha sido imputado. Josep se ha negado a revelar si se ha acogido a la amnistía fiscal decretada por Montoro y se ha considerado «bastante limpio o completamente limpio» con Hacienda.
Desde Miami, por medio de videoconferencia, Josep ha participado este lunes en la comisión parlamentaria que investiga el fraude y ha repetido la versión familiar sobre la herencia del abuelo Florenci. «Cuando muere el abuelo yo tenía 17 años y me lo podían haber explicado pero no lo hicieron. Me lo explican en el 90, y en el 92, Jordi (Júnior) se ocupa del tema, con total confianza. Tampoco contaba demasiado«, ha dicho.
«Ahora he sabido que eran 2 millones de dólares, 62 millones de pesetas. Medio millón para cada hermano y para la madre. Inspección de Hacienda me abrió una inspección que se cerró con conformidad y que recogía todo mi rendimiento y patrimonio hasta el 2011. Esto no es una mafia. Yo me administré mi legado. Cada cual ha ido por libre. No tenemos información de aquella época. La Banca Reig no la ha dado. Mi abuelo era un señor rico», ha dicho, para explicar el origen de la herencia.
