En vísperas de la resolución del concurso de 2.000 millones de euros que ha convocado el Departamento de Salud de la Generalitat para la adjudicación del servicio de ambulancias en Catalunya en los próximos diez años, está a punto de culminar una importante operación empresarial: la compra de la compañía Transporte Sanitario de Catalunya (TSC) por parte de la multinacional danesa Falck.
En la actualidad, TSC es propiedad del fondo de capital riesgo Investindustrial, de la familia italo-catalana Bonomi, que en su portfolio tiene participaciones de empresas muy variadas, como Port Aventura, Panda o Ducati. Después del concurso adjudicado en 2006, TSC controla un 30% del mercado de ambulancias en Catalunya.
Los Bonomi están desinvertiendo aceleradamente para conseguir «dinero fresco» y, en esta estrategia, han entablado negociaciones, que ya están muy avanzadas, para vender la empresa TSC a los daneses de Falck, que en 2012 ya se posicionaron en Catalunya con la compra de la empresa de ambulancias Vicente Lázaro, de Granollers. Si se confirma la compra de TSC, la multinacional Falck podría acabar dominando más del 50% del sector de las ambulancias en Catalunya.
