La afluencia masiva de gente que normalmente hay en el centro de Barcelona se ha reforzado esta tarde de jueves por el casi medio millar de estudiantes que se han manifestado para reclamar poder votar sobre el futuro político de Cataluña el 9 de noviembre. Centenares de curiosos que llenaban las terrazas de la Rambla, las tiendas de la calle Ferran y los halls de los hoteles que hay repartidos por el trayecto que ha hecho la marcha han salido a escuchar los gritos de los jóvenes. La manifestación, que durante una hora ha transcurrido de plaza Universidad a la plaza Sant Jaume, ha mandado un mensaje claro al Gobierno: «Convergència, sin acaba la paciencia«.
La pancarta con el lema: «Paremos las clases, activemos la democracia» y firmada por el colectivo ‘Estudiantes 9N’ que ampara varias asociaciones de universitarios independentistas y de izquierdas ha encabezado la manifestación. Unas diez unidades de la Brigada Móvil de los Mossos de Esquadra cerraba la manifestación, que ha acabado sin incidentes.
«Queremos votar, para decidirlo todo«, o «ningún tribunal nos cortará las alas» han sido algunos de los cánticos empleados por los estudiantes. Se han parado nada más entrar en la calle Ferran para cantar ‘Els Segadors’. El himno de Cataluña ha acabado con gritos de «Visca Terra Lliure».
Dos portavoces han leído un breve manifiesto ante el palacio de la Generalitat, custodiado y bailado. Los estudiantes consideran que hay «un pacto entre élites que quieren traspasar un derecho político y democrático a un derecho judicial». El acto, antes de volver a plaza Cataluña, donde estaba previsto que algunos pasen la noche, ha acabado con el canto del himno catalán.
