CiU tiene que decidir si vota a favor de la ley orgánica de abdicación del rey Juan Carlos que el PP presentará en el Congreso, o si se abstiene. A pesar de la campaña soberanista emprendida en Catalunya, todo indica que la formación nacionalista no se opondrá a la sucesión del monarca en Madrid, y que se abstendrá.
Josep Antoni Duran i Lleida, que ya había adelantado que «no tiene sentido votar en contra» porque se trata de la aplicación de un procedimiento previsto en la Constitución, ha explicado en Twitter que el voto debe decidirlo CiU y que tenía que hablar con el presidente de la Generalitat, Artur Mas, pero que defiende la abstención. Entre los parlamentarios de Convergencia Democrática predominaban las voces partidarias de la abstención y del voto en contra. Finalmente, la opción de la dirección convergente será la abstención. En todo caso, el resultado de la votación lo decidirá el previsible apoyo de PP y PSOE.
Corriente republicana
El socialismo español, por su parte, vive la sucesión en el trono inmerso en su propio proceso sucesorio y el cambio de rey también ha perfilado las discrepancias de su lánguido momento actual. Se apuesta por Felip IV como rey desde buena parte las cúpulas y por un referéndum para escoger el jefe del Estado desde los sectores más jóvenes.
Desde la federación socialista de Barcelona se reclama este referéndum, si bien Pere Navarro ha marcado distancias las últimas horas evitando elogiar a la monarquía y referirse a la República. Francina Armengol, secretaria general de los socialistas de las Baleares, se ha posicionado a favor de votar sobre el modelo de Estado, mientras que el líder de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, piensa que se puede abordar la votación sobre la Jefatura del Estado en una reforma constitucional, pero que no se tiene que emprender esta reforma sólo para dar o no continuidad a la monarquía.
En cualquier caso, Soraya Rodríguez, portavoz del grupo socialista al Congreso de los Diputados, ha advertido que no admiten la libertad de voto de la ley de abdicación.
