Los agentes de la Policía Nacional han liberado a una chica rumana de 19 años en Figueres que era obligada a ejercer la prostitución y que era víctima de vejaciones y agresiones sexuales en un prostíbulo y en la casa particular de sus captores durante las 24 horas del día. Dos personas han sido detenidas en la localidad gerundense y otras tres en Rumanía han sido imputadas.
La chica fue captada por una pareja de proxenetas cuando era menor de edad en su país de origen y mediante engaños y coacciones la trasladaron para ser explotada en locales de Italia y de Girona. Meses más tarde, estos proxenetas la vendieron a otra pareja por 1.500 euros, que continuaron prostituyéndola utilizando todo tipo de coacciones.
Según las manifestaciones de la joven, la tenían sometida a un auténtico calvario, obligándola a prestar servicios sexuales las 24 horas del día, tanto en el club como en el propio domicilio. Le reclamaban 500 euros en concepto de «deuda», por lo cual se apropiaban de la totalidad de la recaudación de sus servicios. También ha reconocido el suplicio a la cual era sometida, trasladada diariamente por los arrestados al prostíbulo de la localidad de Hostalets de Llers donde era explotada sexualmente.
La operación policial se pudo llevar a cabo debido a un aviso a la Embajada de Rumanía en España, que alertaba de un caso de explotación sexual en la zona de Girona. Gracias a la colaboración internacional de los agentes especializados en la lucha contra las redes de trata de blancas para la explotación sexual, se pudo localizar a la pareja de proxenetas en Figueres para su seguimiento y detención.