La explotación de las minas de potasa que hay en Catalunya y que son propiedad de la multinacional Israel Chemical Limited (ICL). Una reciente sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) puede comportar el cierre de la mina de Sallent por sus numerosas irregularidades medioambientales si el denunciante, el jurista Sebastià Estrader, decide ejecutarla. Aunque la Generalitat ha multiplicado los gestos de ayuda hacia ICL, los israelíes están muy molestos con los problemas con que se encuentran en Catalunya. Además, reclaman al agobiado gobierno de Artur Mas la construcción de una nueva línea férrea desde las minas hasta su conexión con el futuro eje mediterráneo para exportar la producción de potasa a Europa.
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