Un grupo de alcaldes del PP de municipios andaluces han protestado este sábado por los impagos de la Junta de Andalucía a sus ayuntamientos haciendo un escrache a la presidenta Susana Díaz, a la salida de esta del hotel donde se alojaba en Málaga. La presidenta andaluza se encontraba en la capital de la costa del Sol, ha donde ha asistido para inaugurar un museo dedicado a Pablo Picasso.
Los alcaldes populares llegaron al hotel poco antes de que la presidenta lo abandonara y se dividieron entra la puerta y el garaje, para flanquear todas las salidas. Incluso llegaron a preguntar en qué habitación se hospedaba Díaz sin conseguir tal información de los recepcionistas. Cuando su coche abandonó el hotel, se ha encontrado con una veintena de personas con pancartas que coreaban «la Junta no paga nos quedamos encerrados». Estos políticos provenían de la Delegación del Gobierno, donde se mantienen encerrados desde el pasado jueves para exigir el pago del dinero que se les adeuda a los Ayuntamientos de poblaciones de menos de 25.000 personas, 17 millones de euros, según sus cálculos.
Los alcaldes y concejales han protestado asegurando que el coche de la presidenta andaluza les ha intentado embestir, aunque en las imágenes no se aprecia. Por su parte, el PSOE ha catalogado como «intolerable» la conducta de los participantes en el escrache. Más tarde, en el acto oficial de inauguración del Museo, un Vicepresidente de la Diputación de Málaga ha sido reducido por los escoltas de Susana Díaz cuando intentaba darle una carta con las reclamaciones de los dirigentes locales de su partido. Según la versión oficial el político del PP no se ha identificado.
El PP, que ha censurado siempre los escraches y se ha enfrentado a la PAH públicamente por protestar en ámbitos de la esfera privada de los políticos, ha copiado la estrategia en esta ocasión.
