Miles de personas, casi 100.000 sólo en Palma, según estimaciones de la Sociedad de Matemáticas de Baleares, han marchado este domingo por las calles de las principales ciudades de las Islas y en Barcelona contra la política lingüística de su gobierno y en apoyo de la huelga indefinida de docentes que afecta a la comunidad desde el inicio del curso escolar.
Una gran marea verde –el color que representa las reivindicaciones del sector educativo en las islas- ha ocupado el centro de las ciudades isleñas contra el plan del ejecutivo de José Ramón Bauzá de introducir el trilingüismo en las escuelas. Aunque la medida pudiera parecer positiva, los docentes reclaman que la medida se ha aplicado sin consenso y que relega el catalán, lengua más utilizada en las islas, a un papel marginal a favor del inglés.
Las manifestaciones en las cuatro islas principales de las Baleares –Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera– han sido masivas, así como la concentración de Plaza Sant Jaume de Barcelona, que ha quedado abarrotada de catalanes en solidaridad con los docentes de las islas.