El ayuntamiento de la ciudad con mayor deuda por habitante de España, Jerez, no ha sido capaz de recortar el gasto municipal en 2013, pese al ERE que aplicó a finales de 2012 sobre 260 trabajadores públicos. En los seis primeros meses del año, el Ayuntamiento de Jerez ha destinado 2,6 millones de euros a horas extra y pagos por productividad, lo que ha provocado que el ERE aplicado por el consistorio no haya tenido repercusión en las finanzas municipales.
Uno de los principales gastos de este consistorio viene de los pagos a los miembros de la policía local y vigilantes de seguridad por trabajar los fines de semana, que se cobran a 200 euros diarios como horas extra, pues no están considerados días laborables. También es importante el gasto en gratificaciones, 785 mil euros, que en seis meses casi iguala al de todo el 2012, cuando se destinaron a este concepto 972 mil euros.
Mientras, la alcaldesa de la localidad, María José García Pelayo (PP), sigue pregonando una política de austeridad municipal para tratar de disminuir una deuda que supera los mil millones de euros, que ya ha sido refinanciada por el Ministerio de Hacienda a cambio de aplicar un plan de austeridad que por el momento no está dando sus frutos.