La Audiencia de Castellón ha condenado a un vecino de Almenara, Carles Mateu Blay, a seis meses de prisión por desobediencia a la autoridad. El motivo de fondo de la condena es la negativa de este ciudadano a hablar en castellano en un control rutinario de la Guardia Civil.
En primera instancia la justicia le absolvió porque consideró que no había motivos para la condena. A pesar de esta decisión inicial, el fiscal recorrió en contra de la absolución y finalmente la Audiencia ha decidido revocarla. Para expresar la disconformidad con esta sentencia se han expresado numerosas muestras de rechazo a través de Twitter con la etiqueta #totssomCarlesMateu.
Esta sentencia se basa en el artículo 383 del Código Penal, en concreto por haberse negado a someterse al test de alcoholemia. De hecho, Carles Mateu dio negativo en esta prueba. La condena para este vecino de Almenara es de seis meses de prisión, inhabilitación para el derecho de sufragio pasivo y retirada del permiso de circulación durante un año y un día.
