El ingreso en prisión del expresidente balear Jaume Matas podría hacerse efectivo esta semana, dos años después del estallido del caso Palma Arena, si el Tribunal Supremo confirma la pena de seis años de prisión acordada por la Audiencia Provincial de Palma.
Matas fue condenado por manipular la adjudicación de la redacción de sus discursos y beneficiar con dinero público el periodista Antonio Alemany, durante su segundo mandato al frente del Gobierno balear, entre los años 2003 y 2007.
Concurso «disfraz»
La Audiencia de Palma considera probados varios pagos encubiertos del Gobierno balear a Alemany, periodista de «dilatada trayectoria» y «afín a posicionamientos del PP», según la sentencia.
Mediante un concurso que la resolución califica como «auténtico disfraz», Matas pagó a Alemán unos 4.500 euros mensuales por escribir sus discursos, así como una subvención de 450.000 euros más que recibió del Ejecutivo para poner en marcha una agencia de noticias.
Acusaciones del fiscal
Durante el juicio celebrado el enero pasado, el fiscal anticorrupción, Pedro Horrach, calificó la trama de «saqueo premeditado de los fondos públicos» y se despachó a gusto con Matas y Alemany.
Del expresidente dijo que era «un buen gestor, pero no del dinero público, sino de su propia imagen», mientras que de Alemany aseguró que era un periodista «rabiosamente independiente excepto del dinero y del poder».
Cuarto presidente condenado
Matas es el cuarto presidente autonómico condenado penalmente desde la Constitución del 1978. La Sala Segunda del alto tribunal revisará el martes la pena acordada por la Audiencia Provincial de Palma y dictará sentencia sobre el caso.
El expresidente balear y exministro de Medio Ambiente fue condenado a un total de seis años de prisión por dos penas diferenciadas por los delitos de fraude a la Administración, falsedad documental, prevaricación, malversación y tráfico de influencias.
¿Segundo ministro a la cárcel?
La suma de las dos condenas que recaen sobre Matas supera con creces el límite de dos años que marcan los tribunales españoles para suspender el ingreso en prisión.
Si se confirman las penas, Matas, en libertad provisional después de pagar 2,5 millones de fianza, se convertirá en el segundo exministro español que va a la prisión, después de que José Barrionuevo pasara tres meses en 1998 por el secuestro de Segundo Marey.
