La investigación de Adif para determinar las causas de la avería que ha dejado sin circular más de la mitad de los trenes de la línea R2 Sur de Cercanías apunta a un cúmulo de fatalidades. Inicialmente, la empresa pública que gestiona la infraestructura ferroviaria atribuyó la incidencia a un rayo, pero ahora afirma que se desconocen las causas de la sobretensión de la catenaria e investiga una “concatenación de circunstancias”.
El director general de Conservación y Mantenimiento de Adif, Àngel Contreras, ha explicado que se trabaja con varias hipótesis: la del rayo, que rechaza la Generalitat; un plástico enroscado en la catenaria o una sobretensión producida por el paso de un tren. Hasta ahora, los técnicos de Adif han averiguado que una sobretensión rompió un hilo de contacto de la catenaria, que cayó sobre una señal, y que después se quemaron todos los cables y se originó un incendio.
Contreras ha asegurado que la catenaria afectada estaba en «perfecto estado» cuando se produjo la incidencia, y ha negado que la avería sea el resultado de una falta de inversiones. Adif mantiene la previsión inicial y calcula que tardará tres o cuatro semanas a resolver la incidencia, puesto que hay unos 8.800 metros de cable afectados por el incendio que se tienen que revisar, y también más de 16 tarjetas electrónicas, circuitos de vía y algunas señales.
