La propuesta de Carles Puigdemont de garantizarse una presidencia a distancia, desde Bruselas, mientras que en Cataluña habría una presidencia que gestionara sus órdenes ha provocado las críticas tanto del PP cómo del PSOE.
La vicepresidenta del gobierno central, la popular Soraya Sáenz de Santamaría, ha calificado de «ridiculez» y «solución absurda» la pretensión de Puigdemont, a quien ha acusado de poner precio «para salir del medio».
En declaraciones a Tele 5, Sáenz de Santamaría ha afirmado que tanto desde ERC cómo desde el mismo PDECat «están deseando sacárselo de encima» de forma que «le están buscando un aparcamiento«.
La vicepresidenta del ejecutivo de Mariano Rajoy ha lanzado la advertencia a Puigdemont de que no piense que se le permitirá estar en Bruselas «para vivir a expensas de Cataluña y los catalanes».
Por su parte, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez ha publicado un tuit en el que dice que «estamos viendo al independentismo renunciar a gobernar en Cataluña», añadiendo que «anteponen los intereses personales de un catalán prófugo a los del conjunto de los catalanes y catalanas, que necesitan un gobierno volcado en resolver los problemas de la ciudadanía».
Este mensaje de Sánchez ha tenido una respuesta directa por parte de Puigdemont, quien también a través de Twitter ha publicado: «Estimado Pedro, si quiere hablar de prófugo como mínimo habla con tu señor Mariano Rajoy y tened el valor de reactivar la euroorden».
El mensaje del expresidente catalán acaba diciendo: «Pero dudo que tomes ninguna iniciativa, dado que eres el primer político de «izquierdas» que, sumando, renuncia a gobernar. Política de papel maché».
